Pedro Bosqued es un auténtico animal literario. Sabíamos de su pasión por la buena literatura, especialmente la narrativa y el ensayo, pero no sabíamos que era un poeta secreto. Lo era y ya no lo es. En el fondo, puede ser desconcertante: siempre te sorprende con sus aficiones, sus manías, sus dones o su curiosidad.
Polonio, título de este volumen, rinde homenaje al personaje de Hamlet, padre de Ofelia. Y lo hace en un libro infrecuente como todo lo que toca: dedica un día de la semana de cada mes del año. Compone 84 poemas, y hay otro más de introducción a cada día de la semana; por lo tanto, son 91 poemas, no muy largos.
Pedro Bosqued crea un discurso muy abierto, culto y lúdico. Inevitablemente, Polonio tiene algo de diario de las pequeñas cosas de cada día, pero también de otros asuntos: el amor, la inmigración, el tiempo material y metafísico, la amistad, la filosofía. El sujeto poético, que a veces da la sensación de ser el propio Pedro Bosqued, describe situaciones, encadena imágenes y estados de ánimo, emplea elementos concretos y abstractos, e interpela constantemente a alguien que podría encarnar el propio poeta, el lector o un ser innominado con el que conversa. Pedro Bosqued escribe con elegancia, ingenio, humor, alguna que otra burla, con un punto de ironía y extrañamiento en ocasiones, seguro de su ritmo y de su lenguaje.
Parece sentirse cómodo en este admirable juego de hacer versos con imágenes, intuiciones e ideas.
Querido lector, como dice el escritor: “¡Te espera lo inesperado!”.
Antón Castro
El autor
Pedro Bosqued (Zaragoza, 1970). Escritor y crítico literario en Artes & Letras de Heraldo de Aragón. Es autor de Pieles de Italia (Confluencias, 2015) y Para cenar, aire (Pregunta, 2020). Formó parte de la I Promoción del Máster de Narrativa de la Escuela de Escritores donde impartió clases de Escritura Creativa y Relato Breve. En este poemario ven la luz las líneas que con el paso de los días de la semana y los meses del año han configurado una manera de pensar lo imprevisto y de fijar lo imprevisible. El inasible empeño humano por sellar lo imposible.