Sinopsis
Algunos de estos artículos, ensayos y/o comentarios, vieron la luz en periódicos locales, revistas especializadas e incluso en alguna página de internet. Otros no. Son, todos ellos, el resultado de unas opiniones subjetivas, experiencias o visiones del autor, que se aprestó a plasmarlas en su día en papel y rápidamente, antes de que se diluyeran para siempre en los abismos del olvido.
Los publicados, fueron, o bien compartidos y aplaudidos por unos, o denostados y contestados, con mayor o menor vehemencia, por otros, esos que, a modo de censores, críticos, negacionistas o “sabios”, disparan ex cátedra sus bilis sobre todos aquellos que no piensan como ellos. Estos, por desgracia, abundan cada vez más en las redes sociales, como el “caradelibro” (Facebook, para los ortodoxos), que, como si les fuese la vida en ello, se sobresaltan, encolerizan y gritan en mayúsculas, cuando un indefenso usuario se atreve a disentir o a opinar sobre la más mínima cuestión.
Luego está el resto, los que no han visto hasta ahora la luz y se atreven a salir de debajo del disco duro del portátil, en busca de aplausos o pedradas, que para eso estamos.
Se suele decir que “cada cual puede opinar lo que quiera”.
Se me antoja que esa afirmación no es del todo exacta, ya que las opiniones, los gustos, las inclinaciones personales en definitiva, no son innatas, ni heredadas, ni de origen genético, sino que se conforman desde que comenzamos a pensar y durante toda nuestra existencia, mediante las distintas influencias que nos vienen dadas por la cultura del lugar donde se nace y vive, por la educación que cada cual recibe; la familia, los amigos, vecinos y conocidos; la información que nos llega de los medios de comunicación, las redes, los libros, la escuela y un largo etcétera. Todo este bagaje influye de manera determinante en la formación de nuestra opinión y gustos, por tanto; de modo que, cuidado con las definiciones, las afirmaciones y los absolutismos, ya que también puede ocurrir que un cambio de influencia, de entorno y de paisaje, puede hacernos alterar nuestra manera de ver las cosas.
Aquí lo dejo. Yo me he divertido escribiendo estos renglones y de paso aprendo. Me divierto haciéndolo constantemente y espero que las personas que las lean, también lo hagan…al menos que lo hagan con cariño.
A esos otros, los amantes de la bronca y el griterío, a los que se encolerizan y acaban por “bloquearnos” en el éter o la nube, que no de la vida y la libertad, les dedico esta compilación de escritos, políticamente incorrectos, que configuran el presente librito, confeccionado a patadas por un aprendiz de escritor. A mandar, oiga.
El autor
Antonio Ruiz Heredia . Nació en Madrid en 1952, aunque de ascendencia aragonesa; estudió magisterio en la Escuela Universitaria “Pablo Montesinos” especializándose en lo que en la época ( Plan de estudios de 1971) se denominaba “Ciencias Humanas”.
Sobrino-nieto del cineasta y escultor almuniense Adolfo Aznar Fusac, quedo muy influido por todo tipo de expresiones artísticas experimentadas por su tío, realizando dibujos, practicando encuadernación artesana y trabajando la madera.
A lo largo de su vida ha llevado a cabo diversos trabajos además del de maestro de escuela: en 1976 firmó un contrato con TVE para sustituir a un naturalista en los rodajes de “El Hombre y la Tierra”, dirigidos por Félix Rodríguez de la Fuente. Anteriormente a dicha sustitución había coordinado algunos turnos de campamento de los organizados por WWF-ADENA en Montejo de la Vega (Segovia), igualmente bajo la supervisión de su creador: el Dr. R. de la Fuente. Trabajó en Ediciones Anaya formando parte del equipo de redacción de una serie de libros de texto para EGB, integrado por maestros y maestras; también de Director en una Granja-escuela; interino en la Administración Central del Estado; encuadernador-restaurador de libros viejos; Director-coordinador de campamentos organizados por asociaciones de índole naturalista… todo ello alternado con periodos en paro y ninguna de estas circunstancias pudo impedir su dedicación a la escritura, que ha dado como resultado unos pocos libros de temática diversa.